La ropa del futuro será electrónica

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roba-electroMIT Technology Review

Prendas de vestir que cambian sus propiedades, como el color y la forma, y que incorporan otras funciones más allá de la estética, como la detección de riesgos para la salud, es el futuro que plantea Joanna Berzowska, directora del departamento de Diseño y Cálculo Computacional de la Universidad de Concordia (Canadá) y de la empresa de textiles electrónicos OM Signal. En su laboratorio, se trabaja con las «prendas reactivas», que son aquellas en las que se integran componentes electrónicos que permiten detectar movimientos, modificar sus propiedades e incluso almacenar energía.

Berzowska explicó su investigación en el simposio EmTech, del MIT Technology Review, que tuvo lugar en Valencia el pasado 6 de noviembre, en el cual se hablaba de cómo la tecnología es una vía para la revitalización de la industria. Así, Berzowska destacó que hace falta «renovar por completo» las estrategias de fabricación y «combinar» la producción textil con la electrónica. «Nuestro horizonte es trasladar la funcionalidad dentro de la fibra y fabricarlas con un proceso de manufactura rápido, para lo cual habría que desarrollar líneas de producción más sofisticadas.»

Esta vertiente industrial que permitiría, en un medio-largo plazo, la popularización de las vestiduras electrónicas depende, en gran medida, de la combinación de dos sectores empresariales muy consolidados y con un alto grado de independencia entre ellos, como el sector textil y de la moda y el sector de la electrónica. Eso supone un bache en el camino de la investigación de Berzowska, pero la vía de los textiles electrónicos se plantea como el revulsivo que podrían aprovechar zonas de tradición textil, como Canadá o como la propia Valencia, para resucitar su industria.

Ahora, el principal reto de esta innovadora industria híbrida entre textil y electrónica es, según explica la investigadora, la miniaturización e integración en las fibras no solo de sensores sino de los componentes electrónicos que los operan. No obstante, ya hay un primer prototipo totalmente funcional de prenda electrónica. Se trata de una camiseta que incorpora componentes electrónicos con los que detecta la biometría del portador y ofrece una gran variedad de información: las pulsaciones por minuto, el ritmo cardíaco, el ritmo respiratorio, los pasos dados y las calorías quemadas a lo largo del día, etc. Además, el software de la camiseta analiza toda la información recogida para detectar el estado de ánimo del portador; los momentos de estrés, de relax, de placer o de intensidad laboral, etc. El usuario recibe toda la información en tiempo real en su dispositivo móvil, de manera que la camiseta le puede dar consejos del tipo «te estás estresando, trata de relajarte», pudiendo llegar incluso a prever el futuro de la salud del portador, como por ejemplo, advirtiendo de un posible infarto.

Kèlsang Bas Belda. Estudiante de Periodismo de la Universitat de València.
© Mètode 2013

 

 

«La vía de los textiles electrónicos se plantea como el revulsivo que podrían aprovechar zonas de tradición textil para resucitar su industria»

 

 

 

 

 

 

«El usuario recibe toda la información en tiempo real en su dispositivo móvil, de manera que la camiseta le puede dar consejos»

© Mètode 2013

Estudiante de periodismo de la Universitat de València.