Pensamiento Creativo

04064

© Miguel Lorenzo

04364

Dani Sanchis. Darwin, 2009. Collage.

Cuando mi primera novela, The Mathematics of Love (La aritmética del amor, Alianza Editorial, 2007), se publicó, mucha gente dio por hecho que el título era una paradoja. También se suele pensar que la ciencia y las artes se contraponen: la ciencia trata de los hechos, las artes del sentimiento; la ciencia analiza el mundo físico, las artes sintetizan aspectos del mundo humano en algo nuevo. Pero de hecho no son exactamente conceptos contrarios. Todo el mundo piensa que los descendientes de Charles Darwin han heredado su mente científica junto a sus genes, pero no es tansencillo. De los cinco hijos de Charles Darwin, William se hizo banquero, George, mi bisabuelo, era profesor de astronomía en Cambridge y Frank era ayudante de investigación de su padre. Leonard era un ingeniero que convirtió su pequeño negocio en The Cambridge Scientific Instrument Company. Horace fue militar, estuvo implicado en estudios científicos tales como la balística, y más tarde pasó a ser presidente de la Royal Geographical Society. Bessie no tuvo ninguna repercusión social, aunque fue la tía más querida por todos los hijos de sus hermanos. Etty, sin embargo, editó un libro de su padre, The Descent of Man (El origen del hombre), y las cartas y documentos privados de su madre. Charles, por supuesto, era escritor, pero ninguno de ellos se dedicó al arte. La nieta de Charles, la artista Gwen Raverat, dice:

Tenían tendencia a considerar las artes como elementos no esenciales de la vida: materias sin importancia. Pero ésta sería una visión superficial: en su trabajo científico mostraban muchas de las características del artista creativo: el sentido del estilo, de la proporción; el amor apasionado por su objeto de estudio; y, sobre todo, la integridad completa y la voluntad de tomarse todo tipo de molestias para perfeccionar sus trabajos.

De hecho, el pensamiento creativo se encuentra en el núcleo tanto de la actividad científica como de la artística. En su libro Sparks of Genius (El secreto de la creatividad, Kairós, 2002), Robert y Michèle Root-Bernstein exploran cómo el pensamiento creativo opera de manera semejante en todas las disciplinas.

03464

Dani Sanchis. Darwin, 2009. Collage.

En todos los campos, eso ocurre preverbalmente, antes de que entre en juego la lógica o la lingüística, manifestándose mediante emociones, intuiciones, imágenes y sensaciones corporales. Las ideas resultantes se pueden traducir en uno o más sistemas de comunicación, como palabras, ecuaciones, pintura, música o danza [pero] sólo después de que estén suficientemente desarrolladas en sus formas prelógicas.

De manera semejante, Stravinsky decía que su música empezaba con «alguna comprensión intuitiva de una entidad desconocida que ya se poseía», pero también «la manera como pienso… no es muy diferente del pensamiento matemático», y Einstein utilizaba la conciencia del propio cuerpo (propiocepción) como el primer paso en la comprensión del comportamiento de los protones: «las matemáticas y la lógica formal eran los pasos secundarios». Pitágoras decía: «Nosotros somos poetas.» Y esta descripción del Nobel de química William Lipscombe podría ilustrar mi propio proceso creativo a la hora de escribir una novela:

Sentí una concentración del intelecto y las emociones que seguramente era una respuesta estética. Iba seguida de un alud de predicciones procedente de mi mente como si yo fuera un espectador que lo veía pasar […]. Solo después fui capaz de empezar a formular una teoría sistemática […]. ¿Era ciencia? Las pruebas posteriores nos demostraron que lo era. Pero los procesos que utilicé y las respuestas que sentí eran más parecidas a las de un artista.

«todo el mundo piensa que los descendientes de Darwin han heredado su mente científica junto a sus genes, pero no es tan sencillo»

Los Darwin y los Wedgwood

El abuelo de Charles Darwin, Erasmus Darwin, formaba parte del grupo de hombres que se hacía llamar Lunar Society [Sociedad Lunar]. Todos ellos vivían en los Mid­lands, donde Boulton y Watt construyeron las grandes máquinas de la Revolución Industrial, Priestley revolucionó la química y Josiah Wedgwood fue precursor de la investigación científica en el campo de la cerámica y utilizó los grandes diseñadores del momento. El artista Joseph Wright pintó cuadros de sus experimentos científicos. Fue en esta atmósfera de arte y ciencia explorándose mutuamente donde Eramus Darwin tradujo al inglés el Systema Vegetabilium de Linneo. En él hablaba del sistema de Linneo como de un «terreno poético inexplorado», tan rico en posibilidades metafóricas como Las metamorfosis de Ovidio, y lo utilizó, junto a sus observaciones científicas, para escribir un largo poema, The Loves of the Plants [Los amores de las plantas], en el que explicaba de manera comprensible el comportamiento de las plantas, es decir, que transformaba la ciencia exacta en términos humanos para lectores ordinarios: el pensamiento transformador es uno de los tipos de pensamiento creativo de Root-Bernstein. Eso hizo avanzar las ideas primitivas de la evolución y se convirtió en un éxito de ventas que provocó un escándalo porque apoyaba la Revolución Francesa y la abolición de la esclavitud; la sintetización –unir ideas que aparentemente no son semejantes– es otro de los tipos de pensamiento creativo de Root-Bernstein. Robert, el hijo de Eramus Darwin, también era doctor, y se casó con Susannah, hija de Josiah Wedg­wood: Charles Darwin fue su segundo hijo. Cuando Charles creció, se casó con su prima Emma, la hija menor de Josiah II, de forma que este matrimonio transmitió un conjunto doble de aquellos genes de Wedgwood. De hecho, Caroline, la hermana de Charles, ya se había casado con el hermano de Emma, Josiah III, y su nieto fue el gran compositor inglés Ralph Vaughan Williams. Fue Josiah II quien animó a Charles Darwin a unirse al Beagle.

03664

Dani Sanchis. Turba, 2009. Collage i Letraset.

Gwen Raverat describió a su familia más inmediata como «benévolamente ignorante», pero Emma había viajado por Europa con sus padres, y pudo visitar todos los centros culturales y artísticos. Su auténtica pasión era la música; recibió clases de piano de Chopin y más tarde sus interpretaciones al piano fueron uno de los grandes placeres de Charles. La música, por supuesto, es la más abstracta y matemática de las artes, y la abstracción es una de las formas de pensamiento creativo de Root-Bernstein.

Las investigaciones científicas familiares abarcaban a la propia familia. El primer Josiah solía anotar lo que decían sus hijos cuando no había adultos presentes. Y mientras cuidaba a Annie, su hija moribunda, Charles tomaba notas técnicas y médicas sobre su estado. Pero nadie que lea sobre la angustia de Charles y Emma al morir su hija podrá acusarlos de falta de amor. Como Emma escribió a Charles en tiempos más felices:

Me parece, a partir de lo que explicas sobre tu propia mente, que no sólo me considerarás un espécimen del género (no sé cuál; los simios, supongo). Debes estar formándote teorías sobre mí y, si estoy enfadada o de mal humor, sólo te cuestionarás: «¿qué demuestra eso?», lo que resultará ser una forma muy grandilocuente y filosófica de tomárselo.

«Se suele pensar que
la ciencia y las artes se contraponen: la ciencia trata de los hechos, las artes del sentimiento; la ciencia analiza el mundo físico, las artes sintetizan aspectos del mundo humano. Pero no son exactamente conceptos contrarios»

Thomas Wedgwood es otra figura familiar; sus ideas e investigaciones se difundieron ampliamente, aunque murió muy joven. Realizó experimentos de óptica con Davy, y discutió sobre poesía y el mundo natural con Wordsworth y Coleridge, que a su vez observaron en él «un excelente y atento sentido de la belleza, unido a la más paciente exactitud en la investigación experimental». Obtuvo imágenes untando papel con soluciones sensibles a la luz, después disponía objetos sobre la superficie antes de exponerlos a la luz. Más tarde utilizó un microscopio como ampliadora para hacer estas «imágenes solares», lo que nosotros llamaríamos fotografías. Igual que Erasmus Darwin, estoy fascinada por las posibilidades metafóricas de los hechos materiales, de hecho el tema central de mi novela La aritmética del amor es la fotografía, así que quise utilizar a Tom como personaje. Pero mi historia está ambientada demasiado tarde, en 1819. Afortunadamente la historia también necesitaba un doctor, así que cogí en préstamo a Robert Darwin para curar un brazo roto y ofrecer una introducción. Leonard, el hijo de Charles, llegó a ser un excelente fotógrafo; sus fotografías son algunas de las mejores imágenes de Charles Darwin de viejo. Pero Charles y Emma eran descuidados con su patrimonio artístico, llegaron a utilizar los camafeos de Wedgwood como juguetes y cuando necesitaron reformar Down House vendieron algunas de las piezas más valiosas de Wedgwood para conseguir dinero.

03764

Dani Sanchis. Posibilidad metafórica, 2009. Collage.

La observación y la creación

Su hijo George tenía pasión por la historia; sus pinturas de caballeros y heráldica aún se pueden ver en la habitación de los niños en Down House. Gwen, su hija mayor, lo describe como «el hombre más romántico»:

La heráldica había sido la pasión inolvidable de su infancia. Aunque no me sorprendería que incluso sus intereses científicos tuvieran un origen romántico; en todo caso, ¿qué puede ser más romántico que las mareas o la luna?… bien estuviera jugando a tenis o bien practicando tiro con arco, caminando por el campo para medir a qué distancia había disparado, se comportaba de manera semiconsciente como un personaje de historia medieval.

Aquí, como novelista, se está identificando con un astrónomo. Pero la identificación también era la razón por la que Erasmus y Robert Darwin habían sido doctores muy prestigiosos, y eso es fundamental para algunas disciplinas científicas: por ejemplo la investigación de Thomas Eisner sobre los sistemas de defensa de los insectos.

«Erasmus Darwin hablaba del sistema de Linneo como de un “terreno poético inexplorado”, rico en posibilidades metafóricas, y lo utilizó para escribir un largo poema, ‘Loves of the Plants’»

Gwen y su hermana Margaret colaboraron con sus primas, las hijas de Horace, Ruth y Nora, y la hija de Frank, Frances, a escribir e ilustrar una recopilación de cuentos de hadas. «Después de un trabajo muy duro», dice la portada, fue presentado al hermano menor de Gwen, Charles, en 1897. Aquel era mi abuelo Sir Charles Darwin, físico. Estaba con Rutherford cuando fisionó el átomo, después pasó la mayor parte de la II Guerra Mundial trabajando en el MIT [Instituto Tecnológico de Massachusetts] en el desarrollo del radar.

03864

Dani Sanchis. El hombre más romántico, 2008. Collage.

Gwen se formó en la Slade School of Art, y se casó con el artista Jacques Raverat. Los Darwin ya conocían a gente como Virginia Woolf, y a través de Jacques llegaron a conocer al poeta Rupert Brooke y a su círculo de escritores y artistas, como los mencionados Tom Wedgwood y Coleridge. Gwen encontró su auténtica vocación en resucitar el arte del grabado en madera. A su vejez, Gwen escribió:

La totalidad de una larga vida se pasa aprendiendo a ver, a conocer lo que se mira con la mente interior: no para ganar experiencia, sino para perderla.

La verdadera observación es el primero de los tipos de pensamiento creativo de Root-Bernstein. Nora se convirtió en botánica y su hija Hilda, en bióloga. Ruth Padel, la hija de Hilda, es poeta. En una ocasión Ruth llevó a Hilda a un recital de poesía; Hilda dijo: «Ahora encuentro sentido a los poetas. Ellos se dan cuenta de las cosas.» Los escritores observan el mundo como lo hacen los artistas y los científicos: con gran atención, pero también con una mente abierta. Con la expresión «perder la experiencia», Gwen quiere decir perder las preconcepciones. El mismo Charles Darwin dijo:

«La hija de George Darwin lo describe como “el hombre más romántico”: “No me sorprendería que incluso sus intereses científicos tuvieran un origen romántico; en todo caso, ¿qué puede ser más romántico que las mareas o la luna?”»

Me he esforzado con firmeza por mantener mi mente libre, para abandonar cualquier hipótesis, no importa cómo de estimada (y no puedo resistirme a formar una sobre cada una de las materias), tan pronto como se demuestra que los hechos la contradicen… Eso me ha llevado de manera natural a desconfiar muchísimo del razonamiento deductivo en las ciencias mixtas. Por otro lado, no soy muy escéptico, un estado de ánimo que creo que es perjudicial para el progreso de la ciencia.

En otras palabras, nos proponemos buscar algo, pero también debemos estar abiertos a lo que no sabemos qué es, y a lo que contradice nuestras expectativas. Tom Wedgwood fue más lejos:

La percepción deviene lenguaje… La mayor parte de lo que se supone que es la percepción tan sólo es el corpus de ideas que una percepción ha despertado.

La idea se ha convertido en fundamental para la Teoría en las Humanidades, pero en cualquier disciplina los hechos observados no se pueden separar completamente de las percepciones del observador.

Margaret, la hermana de Gwen, se casó con Geoffrey Keynes, un cirujano que era también una autoridad en el grabador y poeta William Blake: la ciencia y las artes van de la mano otra vez. Los Keynes tuvieron cuatro hijos que combinaron las ciencias biológicas y la escritura. El hijo menor de George, Billy, fue agente de bolsa.

La pasión de Bernard, el hijo de Frank, fue el deporte; él creó el género de la crónica deportiva, y durante cincuenta años fue el corresponsal de golf del diario The Times. La segunda esposa de Frank, Ellen Crofts, era profesora de literatura en Cambridge en los primeros días de la educación universitaria de las mujeres. Su hija Frances Cornford llegó a ser una poeta famosa. Su poema «The Guitariste Tunes Up» [“El guitarrista afina”], encarna tres de los tipos del pensamiento creativo de Root-Berstein: construcción de imágenes, analogía y propiocepción. La esposa de Bernard era artista y su hija Ursula Mommens todavía es alfarera: y también es ta-ta-tataranieta de Josiah Wedgwood. El hijo de Bernard, Sir Robin Darwin, era artista y director del Royal College of Art en Londres. Con su primo, también artista, Christopher Cornford presidió el renacimiento de la institución. John Cornford, el hermano mayor de Christopher, fue un conocido poeta de izquierdas que murió luchando en el bando republicano en la Guerra Civil española.

Eramus, el hijo de Horace, fue ingeniero, pero murió en la I Guerra Mundial. Los Darwin, sin embargo, fueron relativamente afortunados en la Guerra: mi abuelo Charles y su hermano Billy sobrevivieron, Bernard era demasiado mayor, como también lo era Ralph Vaughan Williams, que, a pesar de la edad fue camillero voluntario durante toda la guerra. La música que escribió cambió completamente después de aquella experiencia.

03964

Dani Sanchis. Osadía, 2008. Collage.

La identidad familiar de los Darwin

Si estamos reconociendo modelos –otro de los tipos de pensamiento creativo de Root-Bernstein– está claro que el otro progenitor –el que no es del linaje Darwin– influye de igual manera en los hijos. Mis abuelos científicos dieron al mundo un cristalógrafo, un ingeniero electrónico, un biólogo y un ingeniero civil; mi padre, abogado y diplomático, representa una ligera aberración, pero heredó la pasión de su abuelo George por las lenguas y la historia, pasión ésta que me contagió. El hijo mayor de Billy, otro Erasmus, ha trabajado con ordenadores desde la década de los cincuenta, y el hijo menor, Philip, es otro agente de bolsa.

Mi propia generación, los tataranietos, refleja nuestra herencia darwiniana y no darwiniana: la lista incluye no sólo biólogos, banqueros, matemáticos, especialistas en tecnologías de la información (IT) y un ilustrador botánico que se convirtió en botánico, sino también abogados, historiadores, músicos, cineastas, diseñadores paisajistas y un ganadero de ovejas, profesión inusual para un Darwin, pero se mantuvo fiel a la tradición al casarse con una prima Darwin. Y cuando quise descubrir lo que están haciendo todos mis primos, telefoneé a mi tía política Angela Darwin: Angela Huxley, descendiente de Thomas Huxley, «el Bulldog de Darwin».

Existe una conciencia de la propia identidad familiar al estilo del siglo xviii. Erasmus es un nombre muy poco común en Inglaterra, excepto en mi familia, y a mí me pusieron Emma porque las cartas de Emma Darwin estaban en la habitación cuando nací. Están las memorias de Gwen, Period Piece [Estampa de época], la obra de Margaret, The House by the River [La casa del río], y la de Bernard, The World that Fred Made [El mundo que Fred creó], que explican cómo era eso de crecer en el laboratorio que era el jardín en Down. Pero no es sólo la familia: también el mundo quiere saber sobre los genes de Darwin. El nieto de Gwen, William Pryor, escribió un relato sobre la gran amistad de los Raverat con Virginia Woolf; y el nieto de Frances Cornford, Matthew Chapman, ha publicado otro sobre el juicio Dover (Pensilvania, 2005). Randall Keynes ha escrito Annie’s Box [La caja de Annie], sobre Annie y el efecto de su muerte en el pensamiento de Darwin. Algunos de nosotros intentamos utilizar la ciencia y el magisterio darwiniano para nuestros propios propósitos artísticos. Aproveché a los Wedgwood en The Mathematics of Love. Ruth Padel utiliza el nombre Darwin para ganar publicidad en su campaña por salvar el tigre. Mi hermana Carola Darwin participó en la puesta en escena de una ópera, Children of Fire [Los niños de fuego], sobre el encuentro entre Charles Darwin y la Tierra de Fuego.

«Las tradiciones tienen desventajas. ninguno de nosotros puede sentir el orgullo de ser el primero en ir a la universidad, en obtener un premio o en publicar un libro: siempre hay alguien que lo ha hecho antes»

Las tradiciones tienen desventajas. Ninguno de nosotros puede sentir el orgullo de ser el primero en ir a la universidad, en obtener un premio o en publicar un libro: siempre hay alguien que lo ha hecho antes y el mundo exterior también lo sabe. La generación de mi padre fue la primera en no tener por lo menos un Darwin miembro de la Royal Society desde que Erasmus Darwin fue miembro de esta institución en 1761. Los hábitos mentales de la familia también pueden ser una cortapisa. Frances Cornford escribió con desánimo sobre «…el asfixiante peso de ser un Darwin», una actitud vital que quizá no toma en consideración aspectos como los sentimientos y la intuición, que no se pueden pesar ni medir. Sin embargo, por supuesto, las características familiares, como las describe el biógrafo de Gwen, Frances Spalding –«persistencia, inteligencia y sentido común»–, son esenciales para el arte y también para la ciencia. La mayor

04064b

Dani Sanchis. Darwin, 2009 Ilustración, collage.

parte de mi doctorado en Escritura Creativa es una novela, A Secret Alchemy (Una alquimia secreta), que se publicará en España este año. Algunos escritores están sorprendidos por el trabajo analítico que también hice para el doctorado, pero si el pensamiento creativo es preverbal, entonces escribir una novela creativamente podría decirse que es preanalítico: el análisis puede llegar más tarde.

El arte es fiel a la experiencia humana, que es un tipo de verdad diferente de los hechos materiales de la ciencia, como muy bien sabían Gwen Raverat y Frances Cornford. Quizá nunca entenderemos ninguno de los tipos de verdad si no reconocemos la parte de la conciencia humana que no es accesible al análisis racional y que se resiste firmemente al pensamiento lógico. Tampoco estamos ahora tan seguros de que el análisis racional llegará inevitablemente a una verdad oficial en toda disciplina. Todas las disciplinas necesitan el tipo de procesos intuitivos y creativos de los que he estado hablando: el pensamiento que no es ilógico sino alógico, que utiliza la observación, la imaginación, la abstracción, la formación de modelos, la analogía, la propiocepción, la empatía: el tipo de pensamiento que los artistas serios y los grandes científicos siempre han utilizado para hacer su trabajo.

Emma Darwin. Escritora y tataranieta de Charles Darwin.
© Mètode, Anuario 2010.

© Mètode 2011 - 64. La mirada de Galileo - Número 64. Invierno 2009/10

Escritora y tataranieta de Charles Darwin.

RELATED ARTICLES