«La saviesa combinada», de Joandomènec Ros

Biografía científica de un maestro

La saviesa combinada


La saviesa combinada
Reflexions sobre ecologia i altres ciències
Joandomènec Ros
Publicacions de la Universitat de Barcelona. Barcelona, 2016. 312 páginas.

La ecología es una de las ramas de la ciencia que aborda mejor la naturaleza desde una visión transversal e integradora. La ecología utiliza no solo los conocimientos de las diferentes disciplinas del saber para entender y explicar nuestro entorno, sino que también hace uso de una gran variedad de metodologías para explicar lo que el científico observa. Esta visión integradora y transversal del conocimiento la encontramos en este libro, en el que Joandomènec Ros utiliza un amplio abanico de formas de explicar su pensamiento y su obra. En el libro podemos leer artículos, textos de opinión, fragmentos de libros y ensayos, pasajes de sus diarios elaborados durante campañas científicas por el océano, etc. El autor demuestra así su versatilidad y diversidad de recursos literarios y educativos para expresar su prolífica y diversa obra científica, educativa, divulgativa y ensayística. A partir de una lista muy completa de escritos, el autor reivindica la ciencia como componente fundamental de la cultura científica al mismo nivel que las humanidades.

La lectura del texto es un viaje por el pensamiento del autor, pero se pueden recoger un número muy significativo de propuestas interesantes para optimizar un sistema tan heterogéneo como es el binomio investigación/enseñanza en el mundo universitario. A lo largo del texto se visualizan dos conceptos que considero fundamentales: un compromiso claro por el papel capital de la ciencia en nuestra sociedad y una clara formación docente. No solo se puede disfrutar del contenido y el relato, así como del pensamiento de una persona apasionada por la investigación y la docencia, sino que no hay ningún apartado que no aporte información y discurso, de los cuales podemos aprender.

La primera parte del libro es como un baño de realidad sobre el complejo sistema de enseñanza y sobre el reconocimiento, no siempre real, de la aportación de la ciencia a la sociedad. El autor explicita cuánta distancia separa todavía lo que la ciencia propone o sugiere y lo que los políticos –asesorados o no por científicos– hacen. La crítica a las administraciones por no saber o no querer escuchar lo que les aporta el conocimiento es realmente sutil y está muy correctamente expuesta. Hay pocos científicos que lo hagan tan bien como el autor. La segunda parte del libro se centra en la transmisión del conocimiento en las aulas, especialmente en las de enseñanza superior reglada, y en las herramientas didácticas empleadas no solo para enseñar ecología a los estudiantes universitarios, sino también a la sociedad en general. El autor reivindica el papel que deberían tener los docentes universitarios e investigadores como divulgadores de su investigación y de su conocimiento. Los elementos del trinomio «investigación, docencia y divulgación» deberían ir juntos y el autor es un claro ejemplo de que quien hace bien una cosa puede hacer bien las otras; tan solo hace falta dar un paso adelante en el compromiso con la sociedad, que el autor ha dado de manera ejemplar.

«El autor reivindica la ciencia como componente fundamental de la cultura científica al mismo nivel que las humanidades»

La tercera y cuarta parte del libro están llenas de experiencias personales tanto en el campo de la divulgación científica como en el de la investigación. Si bien el autor, por su situación actual como presidente del Institut d’Estudis Catalans y otras circunstancias que explica en el libro, ha dejado la investigación profesional activa, no ha dejado nunca de estar cerca de sus resultados. En todos los relatos, especialmente en los más personales, como los diarios de las campañas oceanográficas en los que ha participado como un investigador más, demuestra que sigue con la misma ilusión y capacidad de observar y explicar lo que observa, herramientas fundamentales para todo investigador. El autor ofrece minuciosamente detalles de cuando fue director de equipos que desarrollaban investigación marina innovadora en el litoral catalán, y explica sus experiencias y vivencias personales mientras compartía objetivos y esperanzas con sus compañeros de equipo. Entre líneas se vislumbra el papel de líder de una persona con una sólida trayectoria formativa.

En la última parte del libro, el autor no se olvida del reconocimiento hacia sus maestros, las personas que han marcado su pensamiento y su formación, hecho que le honra y que, como lector, se agradece mucho, ya que es interesante saber las fuentes de su pensamiento para entender mejor los planteamientos y las propuestas. Cada uno de los apartados personalizados se convierte no solo en un relato sobre la vida, obra y pensamiento de la persona elegida, sino también en un conjunto de propuestas y sugerencias surgidos de la mezcla del pensamiento del autor y del científico escogido. Toda una lección de historia y de ciencia, ambas excelentemente combinadas.

Con los epílogos y el anexo se completa un libro variado, heterogéneo y ameno. No puedo olvidar que en el texto se encuentran propuestas para mejorar la investigación y la docencia superior en nuestro país y también una crítica clara, objetiva y respetuosa hacia el no reconocimiento suficiente de la ciencia y del papel de los científicos por parte de la sociedad. Una crítica que se dirige no solo a las administraciones, sino también hacia las posturas de diferentes colectivos sociales sobre temas como, por ejemplo, la paraciencia o el divorcio entre cultura y ciencia. El camino que asume y propone el autor es quizá el mejor para superar estas posturas, y promover la enseñanza y el conocimiento objetivo de la información.

© Mètode 2017 - 92. El universo violento - Invierno 2016/17

Profesor de investigación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Trabaja en la actualidad en el Instituto de Ciencias del Mar de Barcelona (España) donde ha creado el Grupo de Ecología del Bentos Marino y el de Biología del Zoopláncton gelatinoso. En la actualidad desarrolla proyectos de investigación en el Mediterráneo, la Antártida, el Pacífico Sur y el Atlántico Norte. Ha recibido el premio de la crítica Serra d’Or (1985) y el de Medio Ambiente del Institut d’Estudis Catalans (2010). Es el director del proyecto de divulgación «El mar a fondo».