The Library and Museum of Medical History. This article gives news about the Library and Museum of Medical History in Valencia University. The Library, brings together an important collection of medical prints the most important being those dating back to the XVI and XVII centuries. What is more, the Museum holds an extensive collection of source material and iconographs, which come from either the Faculty or private donations. Today, the role of the Library and Museum of Medical History is related to both teaching and research, as well as the preservation and dissemination of our scientific heritage.
La Biblioteca y el Museo Historicomédicos de la Universitat de València se encuentran ubicados en el edificio que hoy ocupa la Facultad de Medicina y Odontología de la Universitat de València. Como su nombre indica, se pueden diferenciar dos partes: la de la biblioteca y la correspondiente al museo. Ambas reúnen las fuentes necesarias para la investigación historicomédica, es decir, aquello que para un científico básico son las preparaciones, las muestras, los aparatos, los cultivos, los animales de experimentación, etc.
El fondo bibliográfico, como corresponde a una universidad que acaba de cumplir quinientos años de existencia, es de un valor incalculable, y nos atreveríamos a decir sin miedo a equivocarnos que es uno de los más importantes del país. En la actualidad tiene más de treinta mil volúmenes, entre los que se encuentran numerosos libros y folletos de gran rareza de los siglos XV al XIX, así como colecciones de importantes revistas del setecientos y del ochocientos. El núcleo originario fue el fondo antiguo de la biblioteca de la Facultad de Medicina, al que después se han sumado las donaciones que desde hace más de cien años han ido haciendo de manera continuada médicos valencianos y del resto de España. Entre las más antiguas destacan las de tres figuras de la pasada centuria que fueron profesores de la facultad: la de León Sánchez Quintanar, notable por la riqueza en valiosos ejemplares de libros renacentistas y barrocos; la de Enrique Ferrer Viñerta, fundamentalmente de tema quirúrgico; y la de Peregrín Casanova, con una abundante colección de textos darwinistas. A la primera mitad del presente siglo corresponden, entre muchas otras, las del ginecólogo Miguel Ángel Fargas, del cirujano Francisco Martín Lagos y del neuropsiquiatra Román Alberca Llorente. Entre las donaciones recientes destaca la del psiquiatra e historiador de la medicina Vicente Peset Llorca, hoy en día conservada en la sala que lleva su nombre.
La biblioteca también posee importantes colecciones de archivos. En primer lugar, los archivos personales, con manuscritos, notas y fichas de investigación de cuatro importantes historiadores valencianos de la medicina: León Sánchez Quintanar, Juan Bautista Peset y Vidal, José Rodrigo Pertegás y Vicente Peset Llorca. En segundo lugar, archivos clínicos, algunos de figuras como el internista Fernando Rodríguez Fornos y el dermatólogo José Esteller Luengo. En tercer lugar, archivos de instituciones, principalmente de la Facultad de Medicina desde finales del siglo XIX.
La segunda parte corresponde al que llamamos Museo Historicomédico, fundado por José María López Piñero hace tres décadas con instrumentos, aparatos y otras fuentes materiales e iconográficas procedentes de la Facultad de Medicina. Hay que señalar que la sensibilidad del profesor López Piñero salvó del olvido, la destrucción y la pérdida todo aquello que hoy se custodia en mejores o peores condiciones, en una época en que la práctica habitual era considerar las cosas antiguas como viejos trastos y por tanto susceptibles de acabar en los basureros. Con ayudas más bien de tipo moral que material, los que entonces componían la cátedra de Historia de la Medicina comenzaron a reunir una colección notable. Con una gran dosis de dedicación, esfuerzo y tiempo se montaron una serie de exposiciones de carácter dinámico, activo y selectivo, no tanto para perseguir el mero deleite estético que producen como por las enseñanzas que se pueden extraer de ellas.
La labor ha continuado hasta la actualidad, y desde los primeros años, se han incorporado multitud de objetos y de instrumentos procedentes de las clínicas hospitalarias y de las clínicas particulares de médicos que han sido, o no, profesores de la facultad. Muchos de los materiales se encuentran ubicados y dispersos en depósitos inapropiados hasta que se consiga instalarlos en el lugar que se merecen. Otra parte se encuentra distribuida en una serie de siete exposiciones fijas que se utilizan para la docencia. Éstas son:
1) “Paleoantropología, paleopatología y paleomedicina”, a base principalmente de reproducciones de piezas óseas y de radiografías se ilustran los principales hitos del árbol filogenético de la especie humana y se ofrecen ejemplos de estudios paleopatológicos sobre enfermedades y trepanaciones craneales prehistóricas.
2) “La medicina en dos pueblos primitivos actuales: los yanomami”, mediante objetos de uso cotidiano y ritual, plantas curativas y fotografías se da noticia de un sistema médico de un pueblo aborigen actual.
3) “La folkmedicina mejicana y la folkmedicina valenciana”, mediante una serie de objetos se explican los principales aspectos de dos medicinas populares que presentan apariencias y diferencias entre sí.
4) “Los sistemas médicos clásicos”, que se ocupa de los sistemas clásicos griego, chino e indio, insistiendo especialmente en dos puntos de vista: la difusión de la medicina griega en los mundos helenístico, bizantino, islámico y europeo medieval, y la aculturación en Europa de elementos de las medicinas clásicas china e india, como la acupuntura, la variolización, el yoga, la cirugía plástica, etc.
5) “Las plantas curativas en la historia de la medicina científica y en la folkmedicina valenciana actual”, ejemplares de los tratados farmacológicos más importantes, una colección antigua de frascos de materia médica y diversas fuentes iconográficas y materiales reflejan el uso de plantas curativas por parte de la medicina científica europea desde los hipocráticos hasta la constitución de la farmacología experimental moderna. Por otra parte se ofrece una selección de las plantas utilizadas en la folkmedicina valenciana actual, considerando el origen histórico y la procedencia geográfica, así como el carácter empírico o magicoreligioso de sus aplicaciones.
6) “La ‘medicina de laboratorio’ en Valencia durante la transición de los siglos XIX al XX”, la asimilación en Valencia de la “medicina de laboratorio”, es decir, la fundamentada en la investigación experimental. Se ejemplifica en cinco aspectos de relieve: el punto de partida de la obra histológica de Santiago Ramón y Cajal, las aportaciones de Peregrí Casanova y de Juan Vilanova Piera en torno al darwinismo y a la paleontología, la introducción de la farmacología experimental por Amalio Gimeno y Vicente Peset Civera, la actividad bacteriológica desarrollada a partir de la vacunación anticolérica de Jaime Ferran en 1885, y los trabajos experimentales de Juan Bautista Peset Aleixandre sobre cuestiones de medicina legal. La exposición se basa en aparatos e instrumentos, complementados con libros y revistas, manuscritos y cartas, fotografías y grabados.
7) “La medicina clínica en la Valencia del último siglo”. Siete salas sirven para reflejar, en parte mediante la reconstrucción de sus escenarios, la práctica en nuestra sociedad de la medicina general, la medicina interna, la cirugía, la tocoginecología, la urología y la radiología. La exposición se centra en el periodo de entreguerras, aunque parte de las principales figuras de las diferentes especialidades durante las décadas finales de la centuria pasada.
«Es necesario superar la idea que relega el museo a un lugar donde se almacenan, conservan y muestran diferentes obras y objetos del patrimonio»
Se puede afirmar que el balance ha sido positivo aunque ni la biblioteca ni el Museo Historicomédico han dispuesto nunca de presupuestos o de personal propios. Se han salvado de la destrucción muchos instrumentos y objetos, se ha sensibilizado la comunidad médica sobre la importancia de conservar aquello que ya no es útil para la práctica cotidiana, miles de estudiantes han tenido contacto directo con las fuentes materiales y eso les ha permitido comprender mejor el desarrollo de las instituciones médicas, científicas y asistenciales, y nuestros materiales han sido incluidos en decenas de exposiciones organizadas en todo el país.
En este último año se ha dado otro paso. En el marco del programa Thesaurus.cat se ha empezado a catalogar todo el material. Es una labor ardua y difícil porque requiere un profundo conocimiento de las ideas y de las técnicas científicas de un determinado momento histórico. Otra misión igualmente compleja es la que se refiere a la conservación y restauración: de momento es una asignatura pendiente. Se requiere ya una respuesta institucional seria que proporcione el marco adecuado para el desarrollo de la biblioteca y Museo Historicomédicos. Es necesario superar la idea que relega el museo a un lugar donde se almacenen, conserven y muestren diferentes obras y objetos del patrimonio. Hoy en día los museos se están convirtiendo en medios e instrumentos al servicio de la comunidad mediante el estudio, la investigación, la salvaguarda y la difusión de su patrimonio. La importancia de los museos está en el potencial de información y comunicación, la capacidad técnica, el personal especializado y el programa museológico.
También es cierto que los proyectos han de vigilar de cerca posibles interferencias como ensayos arriesgados que obedecen a teorías absurdas o a modas, o intereses propios de personajes influyentes en la vida cotidiana. Con todo sí que se debería tener en cuenta sectores como el mundo de las finanzas y negocios, o el de las fundaciones, com fuente de subvenciones.
Por último, se deberán tener en cuenta también las posibilidades que proporcionan las nuevas tecnologías. En nuestro caso, dos de las exposiciones del mueso se pueden visitar a través de Internet, con los elementos añadidos que permite este nuevo medio de comunicación.