Hace unos días el MNAC (Museo Nacional de Arte de Cataluña) me pidió que comentara un cuadro de su colección para un programa de televisión. Elegí una pintura de Feliu Elias, un artista que se inició en el postmodernismo catalán con Nonell, Mir y Casas entre otros, y que además fue caricaturista, editor y crítico de arte.
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La mismísima museología empezó encerrando todo en vitrinas, pero también ha evolucionado hasta encontrar su propio lenguaje. Es la selección natural de la selección cultural.
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Quizá haya que aceptar que lo trivial no es trivial, que la estructura de verdad autogarantizada de una proposición no tiene por qué significar, necesariamente, que la proposición sea intrascendente.
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En alguna posición precisa de la secuencia infinita de dígitos de π aparece por primera vez cualquier secuencia finita de números racionales.
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La creatividad de la mente humana requiere tres cosas: tener una buena idea, darse cuenta de que la idea es buena y convencer de ello a los demás. Está claro que lo segundo no ocurre sin lo primero y que lo tercero no ocurre sin lo segundo.
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Élite: una palabra perversa

Artículo donde Jorge Wagensberg reflexiona sobre los distintos significados y connotaciones que una palabra puede tener dependiendo de la situación y el contexto en que se utiliza, como, por ejemplo, élite, pesebre y bicho.
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El bien encontrado

En septiembre de 2011 se celebró en Ciudad del Cabo, Sudáfrica, el sexto Congreso Mundial de Centros de Ciencia. Algunos participantes tuvimos el privilegio de visitar, durante cuatro días, el parque de Welgevonden (en afrikáner: "Bien encontrado").
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Una clasificación, como por ejemplo la clasificación de Linné para los seres vivos, es una forma de comprensión, un árbol en el que sólo las hojas representan objetos reales, los individuos vivos.
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El paisaje verde es una propiedad antigua y bien asentada. Pero la vegetación depende casi seguro de un modesto y frágil episodio, quizá de un suave golpe de brisa ocurrido en un rincón durante un instante hace centenares de millones de años.
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El principio de la mínima acción va mucho más allá de la mecánica clásica. De hecho se aplica a toda la física teórica. Cualquier ley fundamental de la física tie­ne detrás un principio que se puede escribir como δ S = 0
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Resulta que a lo largo de tanto tiempo, hay un episodio que se repite una y otra vez. Durante alguna obra de reforma o de mantenimiento, un nido de ratas puede quedar emparedado al terrorífico estilo de Edgar Allan Poe.
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