Mientras el sueño profundo se caracteriza por una baja actividad cerebral, en la fase REM la actividad cerebral es alta, parecida a la de la vigilia. Si nos despertamos en esta fase, es muy frecuente que recordemos estar soñando. Pero, ¿por qué soñamos? Lo explica Ferran Martinez-Garcia.
La moralidad se define como «el conjunto de costumbres y normas que se consideran buenas para dirigir o juzgar el comportamiento de las personas en una comunidad», pero ¿alguna vez nos hemos parado a pensar si la biología ha jugado un papel clave en el establecimiento de estos valores morales en nuestra sociedad?
Entender qué nos diferencia del resto de animales es una antigua obsesión del ser humano. Uno de los atributos a los que con frecuencia acudimos para justificar nuestra supuesta superioridad es la inteligencia. Pero, ¿cómo comparar la inteligencia de especies tan distintas como la de un humano, un pulpo o un delfín?
El llibre de Mark O’Connell Cómo ser una máquina se adentra de lleno en el transhumanismo. Desde un planteamiento periodístico, y con una soltura estilística admirable, O’Connell visita los diferentes prohombres de estas disciplinas y va exponiendo sus planteamientos.
«La nueva biología de la mente» explora la base biológica de diferentes condiciones como el autismo, la depresión, la esquizofrenia, el alzhéimer o las adicciones.
El mayor reto de la neurociencia está en comprender cómo surge la mente autoconsciente a partir de la actividad electroquímica de la protuberancia de células que todos transportamos dentro del cráneo.
Xurxo Mariño,neurofisiólogo y profesor titular de la Universidade da Coruña, colaborará con Mètode de manera habitual con su propia sección, Materia oscura, a partir del próximo número 101 de la revista.
¿Cuál es el origen de la autoconciencia humana? El próximo 5 de junio a las 19:00 horas, Xurxo Mariño ofrece una conferencia en La Nau sobre el gran reto de la neurociencia: encontrar el porqué de de nuestra mente.
Perquè el cervell funcione correctament és essencial que el nombre de neurones siga l’adequat: ni més ni menys.
Las interfaces cerebro-computadora (ICC) permiten controlar dispositivos sin generar ninguna acción motora, solo mediante la descodificación directa de las señales cerebrales del usuario.