La exploración espacial requerirá sistemas de soporte vital que incluyan plantas para proporcionar nutrientes, oxígeno, humedad y bienestar psicológico, y que sirvan además para eliminar desechos.
La agricultura del siglo XXI se enfrenta a grandes desafíos urgentes. En la última década se han desarrollado nuevas tecnologías de mejora genética que pueden contribuir a afrontarlos.
Las plantas que comemos son el resultado de un largo proceso de domesticación. En menos de una década, diseñar plantas a la carta ha pasado de ser una utopía a una posibilidad real.