«La revolución no necesita sabios», parece que le espetó el juez del tribunal revolucionario a Lavoisier, poco antes de que lo condenaran a muerte. La historia de los hombres está llena de momentos trascendentes, que han cambiado el devenir de la historia. ¿Qué habría sido de la ciencia en Francia si la revolución hubiera incorporado a sus sabios? ¿Cómo habría cambiado el curso de los hechos? En este monográfico dedicado a la química, elaborado en el marco de las celebraciones del Año Internacional de la Química, hemos querido reflexionar sobre la trascendencia de la figura de Lavoisier, y como él, más que nadie, representa el nacimiento de esta nueva disciplina. El monográfico, coordinado por los profesores Antonio García Belmar y José Ramón Bertomeu Sánchez, pretende mostrar una visión pluridisciplinar de este campo, tanto desde el contexto de la historia de la ciencia como desde la percepción social que se tiene de ella. En este sentido, la entrevista a Bernadette Bensaude-Vincent, una de las máximas estudiosas de la figura de Lavoisier y de la visión social de la química, es un complemento perfecto. Como también lo es la propuesta artística de Uiso Alemany, que, con su atrevida galería de rostros de químicos (químicos ensimismados), introduce un elemento contundente y brillante. En resumidas cuentas, un nuevo número de Mètode, repleto de sugerencias, donde los artículos de fondo se complementan con las imágenes, con las tribunas, con las entrevistas, con las propuestas didácticas… Unas afinidades, electivas o no, que seguro que habrían sido del agrado del autor del Werther. Martí Domínguez. Director de Mètode. |
Unas veces se encuentran como amigos y viejos conocidos que rápidamente se unen y se juntan sin alterarse unos a otros, lo mismo que se mezclan el agua y el vino. Sin embargo, otras se obstinarán en permanecer extraños, sin posibilidad de unión ni aun mezclándolos o frotándolos por medios mecánicos, lo mismo que el aceite y el agua. J. W. Goethe. Las afinidades electivas (1809) |
© Mètode 2011 - 69. Afinidades electivas - Número 69. Primavera 2011