El lenguaje del arte fotográfico

Ahora hace un año titulamos esta columna Instantes de naturaleza en recuerdo de la recientemente finalizada sección de Mètode que llevaba este nombre. Y es que resultaba adecuado para el libro que comentábamos, El fotógrafo en la naturaleza, la obra fundamental de la bibliografía que podría haber tenido aquella sección. Pues bien, ahora podríamos repetir muchas de las reflexiones que hacíamos entonces con Composición en fotografía: no solamente da gusto leer el libro, sino también mirarlo, dado que está lleno de imágenes sugerentes, de gran calidad y, obviamente, de una composición muy cuidada. 

Ante la complejidad de la obra, tan solo podremos ofrecer una pincelada superficial para que se hagan una idea del contenido. Se estructura en ocho partes ordenadas de manera bien lógica: la percepción, los elementos, la luz, la comunicación visual, la composición en fotografía, la evolución, la práctica y el estilo. 

De hecho, la mayor parte del libro no habla de fotografía, sino de la imagen en general, ya que podríamos decir que se trata de un tema «universal». No en vano muchas de las cosas que aprenderemos fueron formuladas para las artes plásticas tradicionales (pintura, escultura…) entre otras razones porque lo fueron cuando aún no se había inventado la fotografía. Ahora bien, evidentemente todo lo que dice se puede aplicar a la fotografía, y él lo hace con numerosos ejemplos.

Prepárense para una lluvia de ideas y conceptos: perspectiva, equilibrio, forma, textura, contraste, relación espacial, contorno, los elementos de la escena, la regla de los tercios, la proporción áurea, la serie de Fibonacci… Por tanto, me atrevo a decir que hasta los más introducidos aprenderán bastante. 

También encontraremos unos recuadros donde van explicando brevemente las diferentes escuelas y tendencias que han ido apareciendo en la historia del arte. Se dice que ya todo está inventado (nihil novum sub sole); quizá sí, pero el problema es que lo desconocemos. Con este libro saldremos de la ignorancia. Finalmente, el propio autor nos anima a no quedarnos en lo que él dice, sino a experimentar y evolucionar.

En resumen, el lector comprenderá no solamente la composición, sino también la transmisión del mensaje visual, de manera que aprenderá a identificar las fotografías geniales y a entender por qué lo son. La obra ha quedado «redonda»: elaborada con mucha erudición, es completa y profunda, pero al mismo tiempo didáctica. No podíamos esperar otra cosa si tenemos en cuenta que José B. Ruiz es profesor, fotógrafo y «tan solo» ha escrito diecisiete libros.

Como le pasa a menudo, se convierte en un clásico de consulta obligatoria para todo el mundo que quiera conocer el lenguaje del arte fotográfico. Querríamos vaticinar su éxito, pero no es posible; solo lo podemos constatar, ya que ¡la primera edición se agotó el día siguiente de salir! Por ello, curiosamente, cuando quien suscribe presentó el libro en Barcelona ¡lo tuvo que hacer con un ejemplar de la segunda edición!

Albert Masó. Biólogo, profesor y fotógrafo de naturaleza (Barcelona).
© Mètode 74, Verano 2012.