La complejidad de definir la ciencia
Mètode presenta la revista en la Universitat d’Alacant
Roberto Ruiz En la mesa, de izquierda a derecha, Josep Bernabeu-Mestre, Martí Domínguez y Luis Gras. |
||
¿Qué es lo que entendemos por ciencia? Esta es la pregunta que se planteó a especialistas de diversas disciplinas con motivo de la presentación de Mètode en la Universidad de Alicante. Martí Domínguez, director de la revista y profesor de periodismo en la Universitat de València animó a los participantes a que formulasen posibles respuestas y a que trazasen la línea que separa lo que es ciencia de lo que no lo es. Josep Bernabeu-Mestre, catedrático de Historia de la Ciencia de la Universidad destacó en primer lugar que debe haber una «clara relación entre ciencia y sociedad» y que para explicar qué es lo que entendemos por ciencia habría que añadir otras preguntas: quién hace la ciencia, cómo se hace y en qué condiciones así como cuál es su propósito. «El intento de contestarlas nos lleva a la necesidad de una aproximación multidisciplinar» y destacó las aportaciones que se hacen desde las diversas disciplinas en el último número de Mètode. También hizo énfasis en el método científico del que dijo que «es una cuestión nuclear del debate» y sobre el que manifestó que no es tanto que haya métodos diversos como «patrones de aplicación diferentes». Luis Gras, profesor de química analítica y decano de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Alicante, citó las definiciones del diccionario de la DRAE y afirmó que la primera acepción lo engloba todo, tanto las ciencias sociales como en el resto de las disciplinas. «No es hasta la cuarta acepción que habla específicamente de los conocimientos relativos a las ciencias exactas, físicoquímicas y naturales» explicó. Más allá de la definición, se centró en la importancia de la percepción social de la ciencia: «en los últimos tiempos hemos dado un salto inmenso, del científico aislado a la comunicación con la sociedad». En este sentido, destacó los datos de la FECYT que muestran que la imagen que se tiene del científico es muy positiva. Luis Gras atribuyó parte de este cambio a la aparición de dos figuras, la del periodista científico y la del divulgador: «gente que en la academia veíamos con recelo y que está haciendo aquello que los que nos dedicamos a la ciencia a veces no hacemos». En esta línea, lanzó algunas cuestiones: esta divulgación cambia la percepción social de la ciencia ¿pero también la de los propios científicos? ¿Hasta dónde se ha de llegar a la hora de hacer más accesibles los conocimientos científicos? ¿Y cuál ha de ser el papel del sistema educativo? |
||
Roberto Ruiz | ||
Espacios en los que reflexionar sobre ciencia Después de estas reflexiones, el coloquio se abrió a la participación del numeroso público asistente. La primera intervención manifestó que la etiqueta ciencia no debería aplicarse a todas las disciplinas y que cada forma de conocimiento tiene que reivindicarse por lo que es, sin necesidad de pretender ser otra cosa. En respuesta, otra intervención del público reivindicó la validez del método científico en las diversas disciplinas a la vez que destacó que las variables que se analizan en cada una son diferentes y que, por tanto, las predicciones que pueden hacerse en cada área de conocimiento también lo son. Finalmente, se destacó que en las sociedades democráticas actuales, las personas están llamadas a tomar decisiones relacionadas con la ciencia y eso plantea nuevos retos a los divulgadores ya que no solo es necesario contar aquello que se hace sino hacerlo de manera que capacite a la gente para tomar estas decisiones. Para cerrar el coloquio, Josep Bernabeu-Mestre destacó la importancia de espacios donde reflexionar sobre la ciencia, «foros como este, que te hacen que te plantees cosas» así como la de poner en común diversas perspectivas ya que «hablamos mucho de interdisciplinariedad pero la practicamos poco». Lucía Sapiña. Observatorio de las Dos Culturas. Revista Mètode. |
Roberto Ruiz |