Igual que los que defendemos la huerta creemos que es una muestra irrenunciable de nuestro ser como valencianos en el imaginario colectivo, también creemos que el litoral es una parte de nuestra geografía y de nuestro referente común.
El mundo rural valenciano ha sufrido un abandono considerable a lo largo del siglo. ¿Qué podemos hacer para paliar los efectos de la urbanización actual? ¿Cómo podríamos mejorar nuestro entorno rural?
Desciframos gracias a Enric Guinot, la arquitectura del molino valenciano: sus raíces, los molinos mejor conservados y la promoción y difusión de la historia de estos edificios, casi desconocidos.