Los primates constituyen un orden que engloba más de trescientas especies, entre las cuales estamos los seres humanos. Quizás por eso nos atrae y nos fascina su estudio, por la gran diversidad de formas y comportamientos que incluye el taxón y porque entender a los primates mejor es una forma de comprendernos de manera más profunda a nosotros mismos.
Este monográfico muestra diferentes aproximaciones al estudio de nuestros parientes más próximos, con el objetivo de determinar qué nos define como grupo e identificar de dónde provienen algunas de las singularidades de nuestra especie. Desde el campo de la paleontología, David R. Begun nos invita a un viaje a lo largo de los casi 60 millones de años de existencia de los primates, interpretando los fósiles para entender la evolución de la inteligencia en este grupo. Seguidamente, basándose en los estudios observacionales de los animales en libertad, Federica Amici describe la enorme diversidad de comportamientos sociales que demuestran los primates hoy en día y analiza las ventajas de la sociabilidad, al tiempo que identifica los retos que esta plantea.
A continuación, el monográfico explora, desde el punto de vista de la primatología, dos de los principales escenarios evolutivos que se han propuesto para explicar el surgimiento de capacidades cognitivas complejas en los humanos: la caza en cooperación y el uso de herramientas. Partiendo de la caza de colobos por parte de los chimpancés, reviso los estudios sobre cooperación en primates, poniendo en evidencia que, en el estudio de la cognición, la experimentación resulta esencial. Alba Motes-Rodrigo, por su parte, aborda el uso de herramientas en los grandes simios y propone la arqueología experimental como un instrumento valioso para comprobar los mecanismos de aprendizaje y, por tanto, la posibilidad de cultura acumulativa en estos primates. Finalmente, Catarina Casanova y Susana Costa nos acercan a Guinea-Bisáu para mostrarnos, a través de entrevistas y observaciones, las complejas y a menudo conflictivas relaciones entre primates humanos y no humanos, y nos hacen reflexionar sobre la necesidad de cambiar las estrategias de conservación, si queremos garantizar en el futuro una coexistencia entre parientes primates con una larga historia.