Foto: Biblioteca Digital Hispánica
Mercedes Maestre Martí (1904-1989) fue una médica republicana, pediatra y socialista, que desarrolló un excepcional activismo por la reforma social y el derecho a la salud. Licenciada en Medicina por la Universitat de València (1928) se doctoró en pediatría en la Universidad Central de Madrid. Como estudiante universitaria, Maestre participó en las acciones de la Federación Universitaria Escolar (FUE) contra la dictadura de Primo de Rivera junto con Emilio Navarro Beltrán, también estudiante de medicina y su compañero de vida. Navarro Beltrán era anarquista, miembro de la CNT y ejerció como consejero provincial de Sanidad desde 1937.
Como consecuencia de haber apoyado las luchas mineras y la revolución frustrada en Asturias de 1934, Maestre fue encarcelada. Fue presidenta del sindicato médico de la UGT en Valencia, al que también pertenecían el tisiólogo José Chabás Bordehore y José Estellés Salarich, inspector general de sanidad cuando ganó las elecciones el Frente Popular en 1936. Maestre ejercía como pediatra y también hacía activismo social y sanitario en centros, revistas y publicaciones, como otros médicos de la época. Era colaboradora de la Revista de Higiene y Tuberculosis (1905-1937), donde se ocupaba de temas relacionados con la salud infantil. Activista infatigable, Mercedes Maestre fue presidenta de la Liga para la Reforma Sexual e impartió cursos y conferencias en centros obreros y ateneos libertarios. También trabajó como médica del Sindicato del Transporte del Grao, afecto a la CNT, y en octubre de 1936 presidía el Patronato de Asistencia Social de Valencia, creado por el Frente Popular.
«Mercedes Maestre desarrolló un excepcional activismo por la reforma social y el derecho a la salud»
La primera ministra de Sanidad de un gobierno en España, la anarquista Federica Montseny, fue nombrada por Juan Negrín cuando el gobierno se trasladó a Valencia en 1936. En un testimonio posterior, Montseny afirmaba: «Cuando me hice cargo del Ministerio [de Sanidad] me esforcé en buscar personal idóneo, con la voluntad de potenciar la presencia femenina en este mundo político, del cual la mujer se había visto casi siempre marginada. Nombré subsecretaria a la doctora Mercedes Maestre…» Desde su cargo, y en unas condiciones durísimas impuestas por la guerra, Maestre trabajó especialmente en las evacuaciones de los refugiados y en la asistencia social y sanitaria a los niños. Por encargo de la ministra elaboró también un borrador de decreto sobre la interrupción voluntaria del embarazo, como el aprobado por la Generalitat de Cataluña impulsado por Félix Martí Ibáñez. Aun así, el decreto de Mercedes Maestre no se llegó a aprobar por el Gobierno de la República.
Más avanzada la guerra, como tantos otros médicos, fue militarizada. Ejerció el grado de capitana militar en el Servicio de Transfusión de Sangre del Ejército, que dependía de quien entonces era rector de la Universitat de València, el catedrático de Fisiología José Puche Álvarez. Maestre tuvo una actuación muy destacada en enero de 1938 en el transporte de sangre destinada al hospital de Garaballa (Teruel), para hacer transfusiones en momentos muy críticos de la guerra en el frente de Teruel. Permaneció en Valencia hasta el final de la guerra.
El 1 de marzo de 1939 salió en barco hacia Orán y de allí a Francia, donde fue ingresada en un campo de refugiados en Saint-Étienne. Después de tres años de exilio francés, en 1942 se embarcó con su compañero en el buque Nyassa, con destino en Veracruz (México). En aquel país permaneció dos décadas, trabajando como pediatra de los exiliados en la Casa Regional Valenciana, en el Centro Asturiano y el Club Mundet. En el exilio continuó militando en el partido socialista. Maestre, junto a Navarro Beltrán, volvió a Valencia a principios de la década de 1960, y retomó la clínica pediátrica en 1964. Murió en el anonimato en 1989.
