Los efectos que dejó la DANA el pasado 29 de octubre a su paso por la provincia de Valencia se pueden ver desde el aire gracias a un mapa que resalta las zonas con barro, desarrollado por la Universitat de València.
El Plan Sur expropió alrededor de 300 hectáreas de tierra y 800 viviendas. El proyecto provocó una herida en la huerta que la propuesta actual del corredor verde trata de cerrar.
El futuro de lo que queda de la huerta de Valencia es muy incierto por la falta de protección institucional ante la especulación urbanística y de relevo generacional entre los labradores. Uno de los elementos patrimoniales mejor preservados de L’Horta de Valencia es la toponimia, a causa del carácter arcaizante propio del lenguaje de los nombres de lugar.