A la memoria del profesor José Delfín Villalaín Blanco, catedrático de Medicina Legal de la Universitat de València.
Las ciencias, especialmente las sociales y las forenses, representan un papel esencial en la interpretación del pasado, desde el más antiguo hasta el más reciente. Los huesos humanos constituyen la huella esencial no solo de lo que un día fueron nuestros antepasados sino también son el reservorio de una memoria que no puede ni debe quedar en el olvido.
La conocida frase «el pueblo que no conoce su historia está condenado a repetirla» constituye en esencia la piedra primigenia de este monográfico, que ofrece una visión pluridisciplinar de una memoria histórica diversa, analizada desde prismas científicos distintos pero a la vez complementarios, donde la historia, la arqueología, la antropología física, la medicina forense, la criminalística y la genética, entre otras ciencias, se imbrican para dar luz y valor probatorio a hechos heterogéneos a partir de los vestigios biológicos del pasado.
En las siguientes páginas, se propone al lector un recorrido diacrónico desde la Antigüedad hasta el presente. Los diferentes autores abordan la historia desde líneas de investigación del siglo XXI, y es el patrimonio bioantropológico y genético el material objeto de los diferentes estudios y el vehículo para entender la memoria de las sociedades del pasado.