La estampa de un tigre dientes de sable a la caza de un caballo ante la atenta mirada de un rinoceronte en el sureste peninsular ahora nos parece inverosímil. No ha sido siempre así.
El País Valenciano es una tierra propicia para la paleontología porque la práctica totalidad de las rocas que afloran en superficie son de carácter sedimentario y, por lo tanto, susceptibles de poseer fósiles.
La antracología empieza a inicios del siglo XX para identificar muestras de madera y carbón prehistóricos. En los últimos años se ha aplicado al estudio del patrimonio artístico.