La fotografía, una herramienta para la conservación

Sorpresa. Esta es la palabra que mejor define las sen­saciones que me ha causado la obra del colega –y sin embargo amigo– Joan de la Malla. Llevo toda la vida leyendo, revisando y reseñando libros de naturaleza y los he visto de todas clases; muchos eran realmente preciosos y he comentado unos cuantos en esta sección. A veces me he encontrado con imágenes muy impactantes, pero esta obra, aparte de incluir fotos impactantes, te cautiva por el conjunto de su trabajo y la forma de exponerlo. Tengo que reconocer que me ha sorprendido, y resulta reconfortante comprobar que a estas alturas todavía no hemos perdido la capacidad de asombrarnos.

Tengo unas ganas locas de comentar cuál es la inno­vación más original, pero no lo haré porque desvelaría su gracia y no me gustan los spoilers. Tan solo comentaré que para leer el libro necesitaréis un utensilio… ¿cuál? Lo veréis cuando lo tengáis en las manos. Sí que explicaré cuál es la estructura de la obra: se basa en un conjunto de 25 grupos de fotos, a modo de bloques de información, cada uno de los cuales se inicia con una imagen espectacular de gran calidad que normalmente transmite ternura. Ahora bien, a continuación vienen otras muy sobrecogedoras.

Así proporciona un doble mensaje: por un lado deja muy claro que todavía tenemos un patrimonio natural muy valioso y atractivo que merece la pena conservar y, por otro, hace una clara denuncia ecológica. Esta puede hacerse poniendo en evidencia una alteración ambiental, como por ejemplo la degradación del medio, los incendios, la conta­minación, las talas masivas, el cambio climático… o puede hacerse mostrando especies en peligro de extinción, el mal­trato animal, el tráfico ilegal de especies prohibidas, etc.

Por ejemplo, una de las primeras fotos es una preciosa imagen de la flor más grande del mundo en su entorno selvático. Después descubriremos la otra cara de la selva: deforestación, explotaciones industriales, quema descontro­lada de bosques, cultivo invasivo de aceite de palma…

Acabaré con las palabras que la conocida primatóloga y conservacionista Jane Goodall escribe al inicio del libro: «Es una forma innovadora y estimulante de exponer el terrible daño que los seres humanos estamos infligiendo al mundo natural […] que despierta nuestra conciencia».

En definitiva, el autor, que ha participado en numerosos estudios y campañas proteccionistas, demuestra con esta obra que la fotografía puede ser una herramienta muy valiosa cargada de futuro para conservar la naturaleza.

© Mètode 2021 - 110. Crisis climática - Volumen 3 (2021)

Doctor en Ecología y Evolución, escritor, profesor y fotógrafo de naturaleza (Barcelona).