El diagnóstico, el tratamiento e incluso el propio concepto de cáncer como enfermedad han evolucionado mucho en el tiempo. De patología de causa única e incurable ha pasado a considerarse una enfermedad en la hay muchos factores que predisponen a padecerla, curable en un porcentaje muy alto de casos (en más del 50%). Y si no se consigue la curación, la enfermedad se puede transformar en un proceso crónico.
En este monográfico se analiza no solo el cáncer de mama, que, siendo el más frecuente y el de mayor importancia en la mujer, también es el que ha alcanzado mejores pronósticos gracias a los avances médicos, sino también otros tipos de cáncer y diversos aspectos relacionados que están dando una luz nueva a este tipo de patologías. Por un lado las causas ambientales que tanto significado están teniendo en el origen del proceso oncológico, pero por otro lado la importancia que tiene la herencia en determinados tumores malignos y cómo esto, cuando el o la paciente es joven, obliga a pensar en preservar su fertilidad. Sobre todo porque en estos pacientes ha aumentado la curación y por tanto la supervivencia, que es en definitiva la meta a la cual habrá que llegar en el máximo número casos posible.
También es de gran interés remarcar la importancia del tratamiento de la enfermedad mediante una cirugía menos agresiva, para lo cual se está desarrollando la robótica. Entre otras innumerables ventajas esta técnica permite que el profesional médico controle de forma muy precisa y en tres dimensiones la solución quirúrgica en cada caso. Por eso cerramos este monográfico con una entrevista al doctor Javier Magriña, que nos habla de los nuevos avances técnicos pero también nos ofrece una visión particular sobre cáncer y la medicina, y el catedrático de la Universitat de València, Rafael Tabarés, nos introduce en su línia de investigación sobre las relaciones entre cáncer y enfermedades mentales.