La primera ‘mascletà indoor’ adelanta la llegada de las Fallas
La Escuela Técnica Superior de Ingeniería (ETSE-UV) ha trabajado junto al artista Edu Comelles en la 7ª edición de la Falla Immaterial
En la ciudad de València, las últimas semanas de febrero se viven cada año con una peculiar sensación de expectación; con el fin del mes más corto del año y la inminente llegada de la primavera, las Fallas se encuentran a la vuelta de la esquina. Cuando se escriben estas líneas, aún no se ha plantado ningún monumento, ni se escuchan petardos por las calles, ni se ven – demasiados – grupos de personas vistiendo idénticos forros polares de colores llamativos. Este año, sin embargo, las mascletàs se han adelantado y desde el 21 de febrero se puede disfrutar de la primera mascletà indoor (en un recinto interior) de la historia.
Se trata del proyecto inaugurado en la séptima edición de la Falla Immaterial, impulsada desde la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de la Universitat de València (ETSE-EV). Este 2023, la Falla Immaterial presenta «SENTiMENT», una propuesta que, un año más, busca aportar reflexiones acerca de la festividad fallera, la cultura y el patrimonio valencianos desde la tecnología. En esta ocasión, la Falla pretende explorar los elementos del paisaje sonoro de la ciudad de València, que se transforma durante el mes de marzo. Así, el proyecto invita a la ciudadanía a visitar dos dispositivos complementarios: «SENT», una instalación sonora inmersiva, y «MENT», una instalación lumínica interactiva. El proyecto, que se presentó el pasado 21 de febrero, podrá visitarse hasta el 26 de marzo en el Centro Cultural La Nau de la Universitat de València.
Francisco Grimaldo, subdirector de la ETSE-UV i director de la Falla Immaterial, explica que cada año la Falla se plantea un reto diferente: en anteriores ediciones se han propuesto juegos, se ha trabajado con música y se ha experimentado con bots, entre otros ejemplos. Esta vez, el equipo se ha centrado en lo que califican como «una de las piezas inmateriales más importantes de las Fallas»: la mascletà. Quizás aquello que relacionamos con las mascletàs en un primer momento es el sonido, pero tal y como aclara Grimaldo, más que el sonido, lo que realmente atraviesa a los espectadores de estos espectáculos pirotécnicos son las vibraciones, la manera tan concreta en la que la presión generada por las explosiones hace sentir. Motivados por esta idea, se propuso un proyecto que consiguiera reproducir con fidelidad el compendio de sonidos, pero sobre todo de vibraciones y sensaciones, de una mascletà. Un año de trabajo más tarde, el resultado encuentra en La Nau su espacio.
Esta es la primera vez que la Falla Immaterial cuenta con la colaboración de un artista. Edu Comelles es músico y gestor cultural, y con su trabajo conjuga el arte sonoro, la producción musical y el diseño en distintos ámbitos de la cultura. Durante el último año, ha colaborado mano a mano con los ingenieros de la ETSE para crear «SENT» (siente). El resultado es una experiencia inmersiva que reconfigura los sonidos de la mascletà y otros paisajes sonoros de las Fallas, que cambia y se transforma a medida que es visitada. Este es una de las características más llamativas de la mascletà indoor: no habrá dos iguales, ya que la presencia y el movimiento de cada visitante genera unos sonidos y vibraciones diferentes. Unos metros más allá, en la plaza del Ayuntamiento, se dispararán un total de veinte mascletàs diferentes durante todo el mes; en La Nau, el número de espectáculos pirotécnicos es potencialmente infinito.
Para conseguir el producto final se ha trabajado con el portal de datos abiertos del Ayuntamiento de València, que se han utilizado como «partituras gráficas». La pieza busca reinterpretar la clásica mascletà desde la contemporaneidad. A la hora de construir los sonidos que compondrán cada mascletà, la ciencia y el arte han trabajado de la mano: por una parte, los ingenieros que colaboran en el proyecto han desarrollado un software que asegura que cada vez que alguien entra en el espacio inmersivo se dispare una mascletà diferente y única. Por otro lado, el artista Edu Comelles ha participado configurando la parte creativa. Buena parte de los sonidos que se escuchan en «SENT» provienen del archivo personal del artista, que hace una década que graba y registra mascletàs. Los demás componentes han sido facilitados por la pirotécnica El Gato, de Chelva, donde se grabaron por separado todos los elementos que forman parte de un espectáculo de esta envergadura para poder combinarlos después. En todo esto proceso, nos explica Comelles, ha sido esencial el trabajo de los ingenieros de DAS Audio, una empresa valenciana que ofreció a la Falla Immaterial los equipos necesarios para conseguir el potente efecto que se buscaba. La clave del éxito, asegura, es la capacidad que los equipos utilizados tienen para generar frecuencias de sonido graves y subgraves. Estas frecuencias, las mismas que podemos experimentar en un festival o una discoteca, son las que nos hacen sentir las sensaciones de vibración tan características de una mascletà, y son imposibles de transmitir a través de unos altavoces corrientes.
El resultado no habría sido posible sin una colaboración estrecha entre todos los profesionales de los distintos ámbitos participantes. Edu Comelles reconoce que la capacidad de llevar adelante el proyecto y resolver los potenciales problemas «se multiplica exponencialmente» si artistas, científicos e ingenieros hablan al mismo nivel. Tanto él como Francisco Grimaldo destacaron durante la inauguración que el trabajo científico y el artístico no deben entenderse como dos ámbitos separados, ya que ambos se benefician enormemente de las aportaciones del otro.
El sonido juega un papel esencial en el universo festivo, es una parte identitaria fundamental capaz de trasladarnos a otros espacios y tiempos y generar por sí mismo imágenes mentales potentes. Es por este motivo que la mascletà indoor se despliega en un espacio de privación sensorial: al entrar en la sala de La Nau encontramos, esperando tras unas tupidas cortinas negras, un espacio igualmente oscuro, sin más estímulos que el sonido, que se transforma con nuestro movimiento.
A partir del 1 de marzo se abren en el MuVIM las puertas de «MENT», la segunda parte del proyecto se trata de una instalación lumínica interactiva que construye un paisaje abstracto creado a partir de los datos sobre sostenibilidad del portal València al minut. En la web de la Falla Immaterial podéis conocer más sobre SENTiMENT y la historia de la Falla Immaterial. Además, si accedéis desde el móvil y seleccionáis el apartado «SENT», podréis crear vuestra propia mascletà –interior o exterior– sacudiendo y agitando vuestro dispositivo para experimentar en primera persona la experiencia de crear y reconfigurar diferentes paisajes sonoros.