Entrevista a Vicent Pelechano

«Es impresionante la cantidad de científicos de todo el mundo que se han volcado con esta pandemia»

Biólogo molecular del SciLifeLab (Suecia)

Vicent Pelechano laboratorio

Vicent Pelechano es licenciado y doctor en Bioquímica por la Universitat de València. Este científico de Algemesí trabajó en el Laboratorio Europeo de Biología Molecular (EMBL) desde el 2009 hasta el 2015, y desde el 2016 es profesor asociado del Instituto Karolinska e investigador del Science for Life Laboratory (SciLifeLab) en Suecia, donde dirige su propio grupo de investigación, el Pelechano Lab, formado por quince investigadores. Allí, el profesor Vicent Pelechano ha desarrollado un método sencillo, rápido y barato para poder detectar el SARS-CoV-2 en enfermos. Desde su despacho sueco, nos explica en qué consiste este método y qué ventajas tiene.

¿Cómo es el test de la COVID-19 que han desarrollado en su proyecto?

En enero, a raíz de la crisis de la COVID-19 en Wuhan, decidimos, junto con unos colegas chinos, aportar nuestro granito de arena. El que hicimos es usar una tecnología conocida, RT Lamp, para detectar cantidades muy pequeñas de material genético [ARN] del virus. Es muy sencillo, consiste básicamente a mezclar la muestra del virus con los reactivos, lo cual produce una amplificación de ADN que se puede detectar por un cambio de pH, fácilmente observable con un cambio de color o por fluorescencia. Es un método complementario muy sencillo de realizar que puede ayudar en lugares donde no hay suficiente capacidad o no tienen otras opciones, puesto que se puede hacer básicamente con una olla con agua caliente.

«Queríamos producir un test que ayudara a detectar y aislar la población afectada para reducir el contagio»

¿Qué otras ventajas tiene su método respecto de los otros tipos de tests?

Básicamente hay dos grandes familias de tests: los que detectan material genético, ARN, y los que detectan proteínas, los serológicos. Los primeros, los qPCR, sirven para diagnosticar gente infectada muy recientemente; los segundos, fundamentalmente, para localizar individuos que ya han pasado la enfermedad y, por lo tanto, tienen anticuerpos. En nuestro caso queríamos producir un test que ayudara a detectar y aislar la población afectada para reducir el contagio. La qPCR o PCR cuantitativa es un método que consiste en aplicar unos ciclos de temperatura a una muestra. Si está la molécula del virus, se duplica sucesivamente de forma que la puedes detectar. Nuestro test es un poco menos sensible que la qPCR y permite, incubando a una misma temperatura durante un tiempo determinado, que un fragmento del virus se amplifique y dé una señal en caso positivo. La ventaja es que no necesitas un termociclador, lo puedes hacer con un equipo muy limitado.

También es más barato y rápido, ¿verdad?

En países pobres no hay bastantes termocicladores ni personal calificado para hacer qPCR. La ventaja de nuestro método es que solo necesita unos reactivos, que cuestan un euro cada muestra, y poner la muestra a una temperatura constante de 65 °C durante media hora. Realmente, se podría hacer en casa o en una enfermería de emergencia, por ejemplo. Además, como requiere muy poco material, también puede ser una herramienta complementaria en países como España, ya que con recursos muy limitados se podrían hacer muchos tests en paralelo, de forma que podríamos hacer miles de pruebas al mismo tiempo. Esto sería interesante para hacer tests masivos, un escenario que se está planteando en el desconfinamiento.

vicent pelechano y equipo

Desde el 2016, Vicent Pelechano es profesor asociado del Instituto Karolinska e investigador del Science for Life Laboratory (SciLifeLab) en Suecia, donde dirige su propio grupo de investigación. / Pelechano Lab

¿Qué países se han mostrado interesados?

Tenemos contactos con muchos países. Este proyecto empezó con una colaboración entre China y Suecia pero actualmente también trabajamos con compañeros de Alemania, India, Austria, los Países Bajos, Polonia… intercambiando protocolos e información para acelerar y mejorar el resultado. Así mismo, compartimos toda nuestra información abiertamente y aconsejamos a países con menos desarrollo científico que el nuestro, como algunos africanos o latinoamericanos. Estamos haciendo todo lo que podemos desde el sector académico. Evidentemente, es un placer poder usar toda la formación que la sociedad ha puesto en nosotros, poder dar una aplicación directa en la investigación básica, que es lo que realizamos nosotros. Y podemos hacerlo simplemente porque tenemos un sistema activo de investigación.

«Es sorprendente la velocidad de progreso gracias a la colaboración mundial»

¿Cómo ha cambiado esta pandemia el método científico?

Es un hecho sorprendente. En condiciones normales, en el mundo de la investigación, los plazos son más largos y hay muchas comprobaciones antes de enviar a revisar, cosa que funciona muy bien pero es más lenta. En este caso, como el problema es urgente y no puede esperar tres meses hasta que tengamos una revisión como es debido, que también se está haciendo en paralelo, todos los grupos de investigación enviamos cada día información abierta para que el resto la lea, la critique, la mejore y haga aportaciones para obtener un resultado mejor. Es sorprendente la velocidad de progreso gracias a esta colaboración mundial. Las cosas que estamos haciendo ahora hace dos semanas no se sabían y en dos semanas se sabrá mucho más. Es impresionante la cantidad de científicos de todo el mundo que se han volcado con esta pandemia, es un esfuerzo internacional impresionante.

¿Cómo ve la polémica con los tests que ha habido en España?

A mi parecer, tenemos que distinguir dos tipos de tests: los de diagnóstico clínico (qPCR), que tienen que ser muy rigurosos, puesto que de ellos depende una decisión clínica; pero yo creo que también pueden ser muy útiles otros tipos de tests, como el que hemos diseñado, que quizás no son tan sensibles, pero que nos pueden ayudar a testar masivamente a la población por su rapidez y sencillez, lo cual puede ayudar a reducir mucho el contagio del virus. A estas alturas se están discutiendo las diferentes estrategias para ver qué es más factible en el ámbito logístico, económico o de salud pública. Es una cuestión complicada en todos los países, no solo en España.

© Mètode 2020
Comunicador y profesor de la Escuela Oficial de Idiomas de Quart de Poblet (Valencia).