La amenaza de las enfermedades infecciosas ha sido una constante en la historia de la humanidad. En los últimos treinta años, un 75 % de las emergentes tienen origen animal y un 17 % se transmiten por un vector.
El último brote de listeria puso de actualidad una dolencia que habitualmente no ocupa grandes espacios en los medios de comunicación, pero que actúa continuamente y afecta a muchas personas, y causa incluso la muerte en algunos de los casos. Estas bacterias pueden convertirse, por lo tanto, en «asesinos inocentes».
Regalando nuestro ADN y nuestros datos genéticos, regalamos el ADN y los datos genéticos de toda nuestra familia biológica. Hay que pensar si el objetivo vale la pena.
Con motivo del Día Internacional de las Enfermedades Minoritarias, dirigimos la mirada hacia el laboratorio donde la investigadora Carmen Agustín pone bajo la lupa el síndrome de Rett. Además, conocemos a una afectada por la enfermedad, Ainhoa Gil; su madre, Vanessa López, explica cómo es el día a día de su hija.
Los miasmas –un nombre espantoso que escondía un desconocimiento sólido– eran los supuestos vapores portadores de partículas de «materia corrompida» que causaban las dolencias infecciosas. Lo creía todo el mundo hasta que se reconoció el papel de los microbios.
La alergia es una patología clínica que sufren algunos individuos y que se desarrollan frente a moléculas inofensivas (es decir, que no son tóxicas ni infecciosas) llamadas alérgenos. El alérgeno provoca una respuesta inmunitaria del organismo, que es la auténtica causante de los daños y la sintomatología de la alergia.
Se cumple el centenario de una pandemia que, entre 1918 y 1919, dejó más muertes que el conflicto de la Primera Guerra Mundial.
El nuevo monográfico de Métode, Narrar la salud, expone varias de las maneras en las que la literatura está ligada a la medicina y la salud.
Amb ocasió de la publicació del número 96 de Mètode, Narrar la salut, parlem amb l’escriptor Julià Guillamon sobre la seua obra Travessar la riera, sorgida a partir d’una experiència mèdica intensa viscuda per ell i la seua parella.
La literatura y la medicina tienen un vínculo muy estrecho, ya que muchas obras se han servido de historias sobre la enfermedad y también se han ambientado en instalaciones sanitarias, entre las que destacan los sanatorios. El sanatorio antituberculoso, como espacio de aislamiento y antesala de la muerte, ha inspirado a muchos autores. La novelística del siglo XX dedicó una atención significativa a estas instituciones que, alejadas del resto de la sociedad, condicionaban la vida de los enfermos pero también su identidad.