Estamos ante un plan de fomento de la diversidad agraria valenciana que nos propone que conozcamos y consumamos nuestros alimentos. Todas y todos estamos llamados a participar en esta conservación activa.
Probablemente desde su creación, los regadíos de la fachada mediterránea peninsular no han experimentado un cambio tecnológico de tanto alcance e implicaciones como el que se ha dado en los últimos treinta años como resultado de la introducción del riego por goteo.
Este artículo revisa los aspectos básicos de la normativa de la Unión Europea sobre la producción de alimentos ecológicos y concluye que, en general, esta no se basa en la ciencia y confunde al consumidor.
La importancia de Valencia en la antigua ruta de la seda ha propiciado la entrada de la ciudad en el Programa de la Ruta de la Seda de la Organización Mundial de Turismo, una iniciativa que une territorios y proyectos de investigación desde el Japón hasta Portugal. Los expertos aprovechan la ocasión para recordar y hacer valer el patrimonio histórico, artístico y paisajístico valenciano.
«Cultivo antiguo y muy nuestro, el cardo es de origen mediterráneo y desde aquí se ha distribuido al resto del mundo»
Mètode dedicó su número 49 a descifrar los secretos del olivo. El coordinador de El árbol eviterno, Fernando Sapiña, repasa la situación de este cultivo mediterráneo en nuestro territorio.
El objetivo principal del Plan de la diversidad agraria valenciana, presentado el 1 de junio, es garantizar la conservación de las variedades locales y su divulgación.
Actualmente el olivo, uno de los cultivos principales de nuestro país, se encuentra bajo la amenaza de la bacteria Xylella fastidiosa. ¿Cómo llegó de las viñas de California a Europa?
El boniato forma parte de los cultivos que salvaron del hambre a muchos valencianos en la posguerra. Muchas personas mayores lo recuerdan directamente asado al horno o en el puchero de boniato. También ha sido y es empleado aún en repostería, como en los pastelitos de Navidad.
El futuro de lo que queda de la huerta de Valencia es muy incierto por la falta de protección institucional ante la especulación urbanística y de relevo generacional entre los labradores. Uno de los elementos patrimoniales mejor preservados de L’Horta de Valencia es la toponimia, a causa del carácter arcaizante propio del lenguaje de los nombres de lugar.